Las bolas de fraile son un clásico de la repostería tradicional que ha conquistado los corazones y paladares de muchas generaciones. Este dulce, conocido también como “buñuelos”, se caracteriza por su exterior crujiente y su interior suave y esponjoso. Si bien existen muchas variaciones de esta receta en diferentes regiones, su encanto y sabor inigualable permanecen intactos.
El tiempo de reposo es esencial para que la masa se desarrolle y las bolas de fraile queden esponjosas. Asegúrate de que la levadura se active correctamente. Si no ves burbujas después de mezclarla con la leche y el azúcar, es posible que la levadura no esté fresca.
Acompáñanos a descubrir la receta de las auténticas bolas de fraile y a revivir el sabor de la tradición. El tiempo de reposo es esencial para que la masa se desarrolle y las bolas de fraile queden esponjosas Mantén el aceite a una temperatura constante mientras fríes las bolas de fraile para evitar que se quemen o queden crudas por dentro.
Ingredientes
- 500 gramos de harina de trigo
- 2 cucharadas de azúcar
- 10 gramos de levadura seca
- 200 ml de leche tibia
- 2 huevos
- 50 gramos de manteca derretida
- Una pizca de sal
- Aceite vegetal para freír
Preparación
1 . En un bol grande, mezcla la levadura seca con la leche tibia y una cucharadita de azúcar. Deja reposar durante unos 10 minutos hasta que la mezcla esté burbujeante.
2. Agrega la harina, los huevos batidos, el azúcar restante, la manteca derretida y la pizca de sal a la mezcla de levadura. Mezcla todos los ingredientes hasta obtener una masa homogénea.
3. Amasa la masa sobre una superficie enharinada durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Forma una bola con la masa y colócala en un bol, cubriéndola con un paño limpio. Deja reposar en un lugar cálido durante aproximadamente una hora o hasta que la masa haya duplicado su tamaño.
4. Pasado el tiempo de reposo, toma porciones pequeñas de masa y forma bolas del tamaño de una nuez.
5. Calienta el aceite vegetal en una olla a temperatura media-alta. Cuando el aceite esté caliente, fríe las bolas de fraile hasta que estén doradas y crujientes por fuera. Asegúrate de darles la vuelta para que se cocinen uniformemente.
6. Retira las bolas de fraile del aceite con una espumadera y colócalas sobre papel absorbente para eliminar el exceso de aceite.
Notas y Consejos
Las bolas de fraile son una delicia que nos conecta con la esencia de la repostería tradicional. Su aroma, textura y sabor nos transportan a momentos de disfrute y compartición. Anímate a preparar estas irresistibles bolas de fraile siguiendo esta receta y a disfrutarlas en compañía de tus seres queridos. ¡Buen provecho!
