El cordero al horno es un plato clásico de la cocina tradicional que destaca por su sabor delicioso y su textura tierna y jugosa. Preparar un cordero al horno requiere paciencia y dedicación, pero el resultado final vale la pena.
El cordero es una carne muy apreciada en muchas culturas y se utiliza en una variedad de recetas tradicionales. El cordero al horno es una forma clásica de disfrutar esta carne, ya que el horno permite que se cocine lentamente, lo que resulta en una carne tierna y jugosa con una capa exterior dorada y crujiente.
Para preparar un cordero al horno, es importante seleccionar un cordero de buena calidad. Puedes elegir entre diferentes cortes, como pierna de cordero o paletilla, según tus preferencias. Asegúrate de que la carne tenga un color rosado claro y que esté bien marmolada, lo que garantiza un sabor y una textura óptimos.
Ingredientes
- 1 cordero (pierna de cordero o paletilla)
- 4 dientes de ajo, picados
- Ramitas de romero fresco
- Ramitas de tomillo fresco
- Aceite de oliva
- Jugo de 1 limón
- Sal y pimienta al gusto
- Patatas y zanahorias (opcional)
Preparación
1 . En un recipiente, mezcla el ajo picado, el romero, el tomillo, el aceite de oliva, el jugo de limón, la sal y la pimienta para hacer la marinada.
2. Coloca el cordero en un plato y cubre con la marinada. Asegúrate de que toda la carne esté bien cubierta. Cubre con papel film y deja marinar en el refrigerador durante al menos 2 horas o durante toda la noche.
3. Precalienta el horno a 160 °C.
4. Retira el cordero de la marinada y colócalo en una bandeja de horno. Agrega las patatas y las zanahorias alrededor del cordero si lo deseas.
5. Hornea el cordero durante aproximadamente 3-4 horas, regándolo con sus jugos cada 30 minutos. La carne estará lista cuando esté tierna y se desprenda fácilmente del hueso.
6. Retira el cordero del horno y déjalo reposar durante unos minutos antes de cortarlo en porciones. Sirve caliente y disfruta.
Notas y Consejos
Puedes variar las especias y hierbas de la marinada según tu preferencia. El romero y el tomillo son clásicos, pero también puedes agregar otras hierbas como el orégano o el perejil. Asegúrate de regar el cordero con sus jugos durante el horneado para mantenerlo jugoso y evitar que se seque.
