Los nuggets de pollo caseros son una opción irresistible para disfrutar en cualquier ocasión. Estos pequeños bocados crujientes y jugosos son perfectos como aperitivo, comida para niños o incluso como parte de una comida principal. A diferencia de los nuggets comerciales, los caseros nos permiten controlar los ingredientes, asegurando una preparación más saludable y de calidad.
La preparación de los nuggets de pollo caseros comienza con la selección de los ingredientes adecuados. Para obtener unos nuggets jugosos y sabrosos, es importante elegir pechugas de pollo frescas y de buena calidad. También puedes utilizar muslos de pollo deshuesados si prefieres una opción más jugosa. Asegúrate de eliminar cualquier exceso de grasa y piel antes de comenzar la preparación.
Una vez que hayas seleccionado las pechugas de pollo, córtalas en trozos pequeños y uniformes. Esto asegurará una cocción uniforme y un bocado perfecto en cada nugget. Para sazonar el pollo, puedes utilizar una mezcla de especias como sal, pimienta, ajo en polvo y pimentón. Estas especias le darán un sabor delicioso al pollo.
Ingredientes
- 500 gramos de pechugas de pollo deshuesadas y sin piel
- 1 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de pimienta
- 1/2 cucharadita de ajo en polvo
- 1/2 cucharadita de pimentón
- Harina de trigo
- 2 huevos
- Pan rallado
- Aceite vegetal para freír (opcional)
Preparación
1 . Corta las pechugas de pollo en trozos pequeños y uniformes.
2. En un recipiente, mezcla la sal, la pimienta, el ajo en polvo y el pimentón. Sazona los trozos de pollo con esta mezcla y déjalos reposar durante al menos 15 minutos.
3. Prepara tres recipientes separados con harina de trigo, huevos batidos y pan rallado.
4. Toma cada trozo de pollo sazonado y pásalo por la harina, luego por el huevo batido y finalmente por el pan rallado, asegurándote de que estén bien cubiertos.
5. Si prefieres hornear los nuggets, precalienta el horno a 200°C y coloca los nuggets empanizados en una bandeja para hornear previamente engrasada. Hornea durante 15-20 minutos, o hasta que estén dorados y crujientes.
6. Si prefieres freír los nuggets, calienta suficiente aceite vegetal en una sartén a fuego medio-alto. Coloca los nuggets empanizados en el aceite caliente y fríelos hasta que estén dorados y bien cocidos. Retira del aceite y colócalos sobre papel absorbente para escurrir el exceso de grasa.
Notas y Consejos
Si deseas una opción más saludable, opta por hornear los nuggets en lugar de freírlos. Acompaña los nuggets con una variedad de salsas, como kétchup, mostaza, salsa barbecue o alioli, para realzar su sabor. Los nuggets de pollo caseros también pueden ser congelados antes de cocinar. Simplemente colócalos en una bandeja separados entre sí, congélalos y luego transfiérelos a una bolsa de congelación. De esta manera, tendrás nuggets listos para cocinar en cualquier momento.